Aunque es algo poco conocido, los números pueden escribirse en mayúsculas y minúsculas, al igual que las letras.
Normalmente cuando se leen cifras en “caracteres minúsculos” se piensa que se trata de una tipografía con un formato particular y no de un sistema alfabético.

En realidad, los números en minúsculas proceden de tipografías especiales, ya que éstos se mantienen iguales y no se modifican, como lo hacen las letras de su propia familia, al cambiar de mayúsculas a minúsculas (manteniendo o liberando la tecla Shift o Bloqueo Mayúsculas). Al utilizar la misma tipografía, no es posible combinar en un mismo párrafo números en ambos sistemas.

Los números en mayúsculas (los de uso habitual) mantienen todos la misma altura entre ellos y ésta es solo algo menor que la de las letras mayúsculas (salvo excepciones en algunas tipografías “artisticas”), mientras que los graficados en sistema de minúsculas responden a las características de las letras con ese sistema, son de cuerpo medio y algunos tienen trazos ascendentes y descendentes con respecto a la línea de base (renglón) como la ”e” la “b” o la “p” respectivamente.

El 0, 1 y 2 mantienen la altura base de las minúsculas (conocida como “altura de la x”).
El 3, 4, 5, 7 y 9 poseen un trazo descendente (bajan del renglón).
El 6 y 8 tienen trazo ascendente (superan la altura de la x).

El uso práctico de los números en minúsculas se aplica cuando se desea mantener la estructura visual del párrafo, pero se necesita escribir una cifra que, por su extensión o tipo, resulta conveniente graficarla en números y no en letras (millones o cifras con puntos o guiones). Si se utilizan los números comunes, éstos formarán un tramo de caracteres altos, similar a una palabra en mayúsculas, y esto puede comprometer la estética del escrito. Aún siendo un solo dígito, al usar un minúsculo se mantiene la “armonía” del texto, especialmente en párrafos extensos y donde la cifra en cuestión no es una expresión matemática o contable.

Es oportuno tener en cuenta que entre números y letras existe una importante diferencia en el proceso de lectura:
Las letras, en su gran mayoría, se leen formando palabras y frases, lo cual ayuda a interpretarlas fácilmente dentro de su contexto (normalmente el 20% de las letras de una oración nunca se “ven”, solo se deducen [por esto los errores de tipeo suelen superan muchas lecturas sin detectarse])
Los números, en cambio, deben identificarse con precisión y uno por uno hasta formar la cifra entera. El “contexto” de la cifra pocas veces facilita la lectura (excepto en las fechas especiales o la cifras redondas), por cuanto el sistema de minúsculas solo debe utilizarse para escritos donde la precisión de la información es menos importante que la estética, como en un relato novelesco o frases informales, pero nunca para una información técnica o contable. Su formato similar a las letras puede provocar confusión, entre el 0 y la o, el 9 y la g, entre otras.
Definitivamente no se deben utilizar para la información de Señales de Seguridad, que de hecho, en este tipo de Carteles todas las letras se grafican en mayúsculas (salvo los símbolos, claro está).